miércoles, 10 de marzo de 2010

La "escoba diplomática" hizo sentir hoy sus efectos

Durante toda la jornada, la Primera Ministra Brenda Bierhoff, en reunión extraordinaria con S.M. Carolus I, decidió dar inicio al plan de sanemiento diplomático, con la anulación de varios tratados y el cierre de embajadas.
El primer comunicado, anunciaba esta mañana la anulación de todo tratado, convenio y otros documentos firmados entre el Reino de Buenos Aires y el Imperio Destroy. El cierre de su Embajada se considera realizado de forma permanente, y se impone asimismo un pedido de disculpas publicas y oficiales por las ofensas cometidas contra el Reino de Buenos Aires y contra la OMU.
Asimismo, fue cerrada la Embajada de la efímera República Democrática de Vulcan, quienes ya habian manifestado por escrito al gobierno bonaerense su disolución.
Una nota triste tuvo el cierre de las embajadas de Carrassia, Gnostopia y Finismund. "Con profundo dolor debemos acometer este acto diplomático, pues nos vemos en la obligación de poner fin a unos tratados que nos ligaban a tres grandes micronaciones, con las que hemos tenido en todo momento, una relación profunda y sincera, y cuyos líderes han trabajado siempre en pos de un micronacionalismo pacífista y mancomunado" señalo Bierhoff al respecto. Por su parte, S.M. Carolus I, declaró que "han sido dos rotundos golpes al micronacionalismo, primero la abdicación de Petrus de Finismund, y luego el sorpresivo anuncio de la disolución de Gnostopia, más cuando siempre hemos considerado a estas micronaciones entre las más allegadas al Reino de Buenos Aires, pero siempre les recordaremos con alegría, y siempre estarán abiertas las puertas de Buenos Aires esperando su regreso".
Más allá de estos sentimientos encontrados, la Primera Ministra explicó que es necesario sanear el panorama diplomático para no caer en un peculiar "coleccionismo de banderas" donde el flujo de contactos entre micronaciones sea escaso o nulo. "Necesitamos sanear la política exterior, para poder reflejar la madurez que pretendemos alcanzar; no podemos seguir sosteniendo ficticias relaciones con micronaciones extintas, sino que debemos enfocarnos en trabajar en un micronacionalismo activo que apunte a aquellas micronaciones que miran hacia el futuro, que proponen ideas y proyectos y que tengan una dinámica similar a la bonaerense, es decir, que se dediquen asiduamente a atender las cuestiones diplomáticas". y como corolario, declaró que la "escoba diplomática" esta lejos de ser arrumbada en un armario.